Aunque falte alguno

Nos desgrana el miedo de verte feliz,
nos asusta un poco nuestra liviandad
y nos paraliza un hoy que cuesta años,
pero nos mordemos y lo amortiguamos
y aunque me haces falta con tus cicatrices
te regalo el aire para que respires
de mis emociones y mis incoherencias
y te vayas lejos (hasta donde quieras)
y vuelvas cansado, sin ganas, sin visas,
pero con abrazos, pero con abrazos,
porque sin abrazos el tiempo incinera
la piel en los brazos, la sangre en las venas.

Nos abruma el viento torpe del desierto
que arrastra la sombra y esparce la arena
y nos subestima un pasado pensado,
pero nos hablamos y lo desatamos,
y aunque nos perdemos y nos reprimimos
cuando más nos vemos y necesitamos,
siempre está la risa que calma y la prisa
por recuperar el tiempo malogrado.

Nos abarca un clima que nos resquebraja,
nos inquieta un alma que nos amontona,
nos apabullamos para hacernos fuertes
y nos conformamos con volver a vernos
aunque falte alguno.

1 comentarios:

  El Peladito

21 de mayo de 2008, 1:38 p. m.

amen